La comida no se tira

Taller La comida no se tira
18.05.2013 11:00h. - 13:00h.
Lugar: Medialab-Prado. Cantina (planta baja)

Uno de los principales métodos de conservación de los alimentos que te sobran es cocinarlos en otros platos: el aprovechamiento. Con este taller vamos a aprender juntos a recuperar la memoria de las modos de aprovechamiento que fueron parte de nuestra memoria colectiva durante épocas de escasez, y que alguna de ellas siguen siendo aún hoy recetas muy comunes en nuestra gastronomía.

El Foodlab de Medialab-Prado aspira en sus líneas de trabajo llegar a concienciar sobre los valores del reciclaje de alimentos frente al derroche.

#Foodlab
Entrada gratuita. Actividad para familias.

Hoy en día, en la Unión Europea se desperdician anualmente 179 kilos de comida en buen estado por habitante, lo que equivale a un total de 89 millones de toneladas al año. El 42% de este desperdicio tiene lugar en los hogares, según un informe de la FAO.

De la mano de David Rodríguez empezamos una serie de talleres prácticos donde cocinaremos, compartiremos buenos ratos, mientras charlamos sobre los los siguientes contenidos:

a) Introducción: La memoria del hambre y el justo valor de los alimentos:

Generaciones y generaciones de nuestros antepasados han guardado portentosas recetas hechas a base de escasos ingredientes. La infancia esté llena de recuerdos y frases de nuestras madres como: "Ni se te ocurra dejar algo en el plato: hay muchos niños que no comen". La experiencia del hambre contribuyó por un lado a valorar más los alimentos, pero también sirvió para crear maravillosas platos con muy poco, desde la Tortilla de Patatas hasta con las sobras del cocido o la Ropa Vieja.

b) Un recetario de abuelas para cocinar con restos:

Cocinar con restos es rico, sano y si te haces una bandeja de croquetas siempre quedas como un príncipe o un princesa. Aquí aprenderemos las recetas clásicas escritas en viejos cuadernos por tus abuelas o madres, pero también a cómo compartir tus excedentes haciendo conservas, encurtidos, y otros fáciles métodos para hacer en casa toda la familia o con amigos.

c) Los básicos o cómo entrarle a la comida caducada sin ser un faquir:

Cocinar con pan duro, leche sospechosa y fruta pocha.
Nociones de cómo hacer queso, mantequilla, yogur, etc.
Pan rallado (aliado fiel en puddings y croquetismos). ¡Migas y sopas de pan!
Polos de fruta. Mírame, hazte puré y quédate helada.
d) Conserva, parte y reparte. Recupera el placer de compartir con tu familia, de regalar a tus vecinos:

Tus mermeladas y compotas, chutneys (salados) y patés, limones encurtidos sabrosos y decorativos.
Empanadillas de escabeches. Quiche Lorraine de guisote de ayer. Hojaldres de pisto.
Métodos de conservación y salud alimentaria: temperatura, acidez, azúcar.
La santísima trinidad de la cocina de restos: Croquetas, Canelones y Ropa Vieja.

Y recuerda: trae a tu abuela, madre, o incluso a tu marido, para que entre todos recuperemos algunas de las recetas de aprovechamiento que guardamos celosamente en nuestras viejos libros de cocina.

¿Qué es el Foodlab?

El FoodLab es un proyecto relacional sobre cocina que conjuga lo productivo, lo placentero y lo compartido que pretende practicar una mediación que se centre inicialmente en el apoyo a proyectos locales que refunden nuestra relación con los alimentos. Un lugar cercano entre fogones donde construir un recurso de producción colaborativa que nos permita generar estrategias y herramientas para repensar la sitopía de los alimentos que nutren y construyen una urbe como Madrid.

Hackear, producir y consumir nuestros propios alimentos de un modo sostenible, producir nuevas estrategias de consumo colaborativo, luchar contra el despilfarro de alimentos en las grandes comunidades, etc.

Coordina: David Rodríguez.
D.