Periodicucho

Público ha sacado a la luz su verdadera faz.

Cómo ya os conté, han enviado a Mar con cuatro perras a escribir crónicas trotamúndicas por el sur de España. En principio, puede narrar todas sus andanzas en unos artículos ligeritos para la sección de verano. Textitos entre la narración de viajes y la aventura pura y dura sobreviviendo con los 30 € al día que le dan en calidad de dietas.

Pero un mal día, su crónica personal (ella publica también en su blog) con la del diario, no coincidían. ¿Hay alguien más viviendo sus experiencias por ella misma? ¿Tiene personalidad múltiple?

No, señoras y señore, lo ocurre es que ya estamos con la mierda de siempre, es que no cambiamos. Mar ha dado, certeramente, con la clave de esta mierda: si, por ejemplo, durante el viaje se folla a alguien y lo cuenta, bien. Pero si pone que ha robado en un super para comer, si menciona a YOMANGO, sus jefes le cojen el artículo y se lo modifican (censuran) antes de publicarlo...

Periodicucho de tres al cuarto...
D.

* De nuevo nos encontramos con el eterno problema de España, las diferencias insalvables entre los currantes y los que les mandan. Dos mundos antagónicos, dos países diferentes que no se entienden. Los que curran (nosotros) y los que lamen culos (los jefes).

* Para mi, por ahora, que le den al diario Público.