Barcelona racista

A una empleada de las aerolíneas Vueling las autoridades le obligan a revisar los papeles de los viajeros en el check-ing.

HdP llega al mostrador para poder tomar un avión de vuelta de su estancia en Barcelona. Pero la empleada de la aerolínea, le va a hacer perder por capricho ese derecho.
Su incompetencia le impide saber que el papel de identificación que le ofrecen es legal. Pero, curioso en un mundo que se presupone lógico: no llama para preguntar, no lo averigua, sólo saca lo peor que tenemos dentro los españoles: la chulería, mezclada con los prejuicios.
-Tú no sales de Barcelona... Le llega a decir, para pasmo y asombro de los testigos.
HdP pierde increíblemente su vuelo, grita, no puede llegar al trabajo en Madrid, bronca o despido, sino ambas. Llora. La injusticia.

Al fin, consigue que su papel sea revisado por un empelado competente y formado que le da la razón. La pesadilla va a terminar a pesar de que debe pagar otro vuelo. La empleada que sigue en su mostrador, no se disculpa y farfullea con mirada de odio algún insulto en catalán. Mientras, su supervisora habla con ella por teléfono reconfirmando la validez del papel presentado.

Triste país de fascistas: España.
D.