Olvido
Desertar. La vida es una trinchera.
Una obligación de fuego y barro.
Nadie nos pide nacer, nadie nos pide sufrir, nadie nos pide amar.
La vida es un recorrido por esquinas y callejones.
Es una botella bebida hasta el final.
Es un hueco en un portal, incómodo, sucio. Un lugar inapropiado.
Un descampado debajo de un puente. Pasillos de trenes de cercanías.
El deseo se construye con la mirada.
Luego hay olores, roces, bocas.
Luego hay mensajes. Esperar. Tramar. Correr hacia ti atrapado en un autobús.
Luego está el fuego. La inconsciencia de la piel.
Unos juegos que son tiernos modos de construir en los márgenes.
No ha habido verdadero sexo, sólo notas a pié de página. Un bagaje literario, poco brillante.
Los días son largos, las certezas escasean.
Una puerta giratoria que no para de girar conmigo dentro. Un convoy que no se detiene en la estación.
Todas las calles parecen la misma. Infinitos árboles. Estrechos caminos.
Un incendio que se extiende. Construimos sobre el abismo.
Voy hacia la Calle del Olvido. Sin brújula.
Almas gemelas enfrentadas con guantes de boxeo. Sin rechistar. Nos tiramos al suelo, nos arrancamos el cabello.
Miradas esquivas, sonrisas de medio lado.
Dias después, el cuerpo se rompe, se curva la espalda.
Me hablan al oído, sólo escucho un crujido. La caja resuena llena de cristales rotos.
Un pavor eléctrico cruza mi espalda. Lo hace unas horas si, y otras no. Preciso.
Jodiéndome, y cerrándome la escapatoria al mismo tiempo.
Y yo me muero. Atrapado.
Voy a Olvido donde me sacas la garganta. Tus manos me ahogan, tus patadas me hacen levantarme temprano.
A la luz del alba, a solas con los pájaros desnudos.
Soy una leyenda de tejados abuhardillados.
Un camino por organizar.
No duermo, no sueño.
Olvido.
https://www.flickr.com/photos/tinapatersondibujo
D.
Etiquetas: amor verdadero, De regreso a casa, dibujillos, mi vida es asín
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