10.26.2008

Porno


Es evidente que muchos hombres heterosexuales se empalman pensando en ser penetrados por otros hombres, o ser humillados, sodomizados por una mujer, del mismo modo que es evidente que muchas mujeres se exitan con la idea de ser violadas, de participar en un gang bang o de ser folladas por otra mujer. El porno también nos puede molestar porque revela que somos inexcitables mientras que nos imaginamos a nosotros mismos como calentones insaciables. Aquello que nos excita o que no nos excita proviene de zonas incontrolables, oscuras y pocas veces en acuerdo con lo que deseamos conscientemente. He aquí el interés de este género cinematográfico, si nos gusta soltar amarras y perder la razón, he aquí también el peligro de este tipo de cine, precisamente si tenemos miedo de no poder controlarlo.
Teoría King Kong, de Virginie Despentes. ¿Por qué este libro tan bueno no se estudia obligatoriamente en los institutos de secundaria españoles? Fácil, los que deciden, son unos capullos. No peor. No sólo son tan idiotas como parecen, es que además se han quedado obsoletos. Así va el mundo:

¡Rajoy, púdrete! ¡Zapatero, vete ya! Y de ahí para abajo... Un mundo nuevo, por favor.
D.

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2 comentarios:

Blogger Galina ha dicho...

Hola Tina
Te había enviado este correo que voy a reseñar a continuación pero me ha venido devuelto y sí había escrito bien la dirección que tienes con su arroba :):

Hola Tina

No conozco "La Teoría King Kong" pero he ojeado alguna sinopsis en la Red sobre ese libro y considero que, tanto la pornografía, como la prostitución volutaria, y todos estos mil y un conceptos y temas sobre los que no existe ni existirá jamás un acuerdo, son decisiones que deberían limitarse única y exclusivamente al ámbito de lo personal.

Personalmente, le doy más importancia a, por ejemplo, el suicidio como derecho y la eutanasia como opción. Incluso desde el punto de vista de las nefastas religiones (sea la que sea incluyendo la mía -soy judía-) si todas ellas consideran en sus doctrinas que la "virtud consiste en vencer a los instintos", ¿qué mayor virtud puede haber entonces que vencer al mayor de los instintos, que es el de la conservación de la propia vida?.

En fin. Estamos en lo de siempre y es cierto lo que escribes que, después de arrojar a los rajoy y zapateros de todo el mundo al foso, habría que comenzar a reestructura un mundo y tendríamos que comenzar a hacerlo suprimiendo los actuales países y creando otros más pequeños -utopía es considerar que desaparezcan- y pasando de religiones, banderas, himnos y símbolos. Personalmente no creo en nuestra especie y creo que no nos falta mucho para extinguirnos... lo que supondrá un descanso para el planeta y para el resto de las "personas" normales a las que calificamos de animales.

Besos desde Hungría

Galina Abraham
http://www.anal-izada.com

Me imagino que aquí sí lo verás y bueno... ya mirarás si funciona.

miércoles, octubre 29, 2008  
Blogger Tina Paterson ha dicho...

Prueba otra vez: tinapaterson@gmail.com , en cualquier caso, la idea del post es la idea del libro: que no se adormezca la gente, ni la lucha por los derechos de la mujer. La autor lo dice a su modo, potente, sentido y algo frentista. Pero yo me adhiero a éste modo de pensar, y pienso que la culpa de los males, no son de la gente, sino de los que nos mandan y nos manipulan, por sus fines espúreos.
Vamos que hace falta menos defender y proteger al capitalismo (bolsas, bancos), y pensar más en la gente.
Vamos digo yo.
jaja

y gracias por tu post!

miércoles, octubre 29, 2008  

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