8.13.2008

La noche del cometa

Los niños de las favelas juegan con cometas. No es un tópico o una imagen de anuncio, no. Aquí, cuando sopla un poco de viento, vuelan cometas caseras por los cuatro puntos cardinales. Al final, muchas de ellas se acaban enganchando a los innumerable postes y cables de luz, que quedan adornados como de espumillón navideño.

Anoche, Leti y yo nos subinos a la terraza del hotel a la vuelta de una cena. Siempre está desierta y es un increíble lugar para observar miles de estrellas urbanas y alguna en el cielo. Tomabamos cerveza y nos reíamos tranquilos, cuando de repente en las alturas vislumbramos como se desacía un estrella.

Tras el estupor, pensamos que es la época de las lágrimas de San Lorenzo. Pero que quizá se trataba de un cometa que venía derecho hacía nuestra dirección. Una estrella con cola, en apariencia muy próxima, cruzó el cielo de este a oeste, mientras le seguíamos agitados a través de la azotea del edifico.

Vimos un cometa en la noche de Sao Paulo.
D.

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3 comentarios:

Blogger Carmen ha dicho...

qué momentazo!!

he estado enganchadísima a las crónicas...quiero charleta con cañas!!

Besos

viernes, agosto 15, 2008  
Blogger Tina Paterson ha dicho...

biennn!
nosotros llegaremos mañana ya!
D.

viernes, agosto 15, 2008  
Blogger Carmen ha dicho...

yo estoy en Madrid el martes...hablamos pa la próxima semana...cañitas al solecito de lavapiés...mmmm...

besos

viernes, agosto 15, 2008  

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