1.30.2008

Líneas entrecruzadas

Volví a soñar que tenía un hijo.
Un sueño intoxicado por una llamada de ella.
Contaminación cruzada, apropiación indebida de una paranoia ajena.
Hace tiempo que como Isaac (17 de agosto, no se olviden) decidí ponerme a prueba y sacrificar mis deseos. Pero, entonces, volví a vivir en esa sustancia alucinógena que tanto bien me hace y todo afloró de nuevo.
Ser y ser para el otro.
Atardecer en su terraza.

Etiquetas:

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio